En el siglo XXI la velocidad y la transformación digital son dos conceptos que viven unidos. Si buscamos de forma independiente su significado podría parecer que no tienen ninguna vinculación, pero la era digital ha convertido estos dos conceptos en un matrimonio perfecto.
- Velocidad: es la magnitud física de carácter vectorial que relaciona el cambio de posición (o desplazamiento) con el tiempo. En virtud de su carácter vectorial, para definir la velocidad debe considerarse la dirección del desplazamiento y el módulo, el cual se denomina celeridad o rapidez.
- Transformación digital: es el cambio asociado con la aplicación de tecnología digital en todos los aspectos de sociedad humana.
Nos pueden parecer dos conceptos totalmente inconexos, pero en la actualidad, se habla mucho de la transformación digital de las empresas, la digitalización y la búsqueda de soluciones que permitan reducir procesos con el objeto de ser más eficientes y veloces.
Aun con el paso del tiempo todavía existen empresarios y ejecutivos que no valoran la importancia de tomar las decisiones adecuadas en el momento adecuado en torno a la transformación digital. Estas decisiones resultan son vitales, ya que están desapareciendo muchas empresas del mercado por no saber interpretar la importancia de la velocidad tanto en la información como en los procesos.
El mundo empresarial esta evolucionando a marchas forzadas y no nos damos cuenta de la magnitud del hecho. A través del cambio a la digitalización de manera eficiente va a permitir a compañías estar o no en un futuro próximo en el mercado.
Las nuevas generaciones, tanto de consumidores como de decison makers de las empresas, van a demandar sostenibilidad y transparencia como ADN de base. Que mejor manera que la tecnología para poder asegurar ambos conceptos y todo ello implantado en el momento adecuado y con la rapidez adecuada.
Es fundamental en el futuro inmediato de las empresas la toma de decisiones rápidas y evolucionar hacia modelos de negocio flexibles, escalables para soportar las constantes mutaciones de los mercados, donde solo se sostiene con buena tecnología. Hay que tener un buen sistema de gestión, ERP-BI-CRM así como Plataformas Blockchain, IoT, para sostener modelos de transparencia en la cadena de valor para asegurar la calidad y veracidad del dato.
Autor: Joan Ferrán, socio de RSM Spain Consultores